A principios de el año pasado mi querido esposo me regaló de cumpleaños una tablet para aligerar un poco la carga de mi bolso. La idea era tener libros, biblia, portátil, en un sólo lugar para poder hacer las cosas de una forma más práctica y no cargar tanto peso. Aquí les cuento la historia de como este aparatico cambió de dueño ...Debe ser producto del brillo, los colores o el movimiento generado en respuesta al tacto, pero todos los niños y sobre todo los bebés tienen una fascinación extraña por los objetos electrónicos como teléfonos móviles y tablets.
Gabby no podía ser la excepción a esta regla, y es que desde la primera vez que comenzó a llorar desconsoladamente la única forma en que pudimos calmarla fue tomar la table y en youtube buscarle el video de ÁNGELES DE DIOS, una alabanza que le gusta mucho y fue algo de efecto inmediato. Luego de esto, y pensando que sería lo más sabio para estar prevenida en las salidas con la niña, opté por descargar videos del payaso piñon fijo, de la gallina pintadita y algunas aplicaciones diseñadas para bebés, sólo para esos casos en los que estuviéramos fuera de casa y necesitáramos distraerla o calmarla inmediatamente.
Al principio no hubo problemas, ella veía los videos calmada, sonreía y movía sus piecitos con una alegría y felicidad tan grandes. Hasta que llegó ese día en que las cosas ya no volverían a ser iguales, el día en que colocó su dedito en la pantalla y DEVOLVIÓ LA CANCIÓN COMPLETA para que volviera a sonar... ya nada fue igual luego de eso!
Algo que mi madre aún no sabe hacer, mi niña de un año y un mes lo hizo con la misma naturalidad y propiedad con la que toma el tetero y se lo mete a la boca cuando tiene sed.
Yo no sabía si reír o llorar porque tan estaba orgullosa del logro #GabbySofia que aparté la tablet para así poder darle un beso en la mejilla. Grave error, me ha mirado molesta y con sus manitos en el pecho a todo pulmón fuerte y claro dijo: MÍIIAAA y se abalanzó sobre la tabla hasta cogerla.
En la iglesia ya nos toca llevar la Biblia y la tablet porque la considera de su propiedad y se molesta como otra persona la tenga. Esto no sé si sea bueno o malo, lo único que sé es que de tantas cosas que he leído en Internet no sé que tan ciertos sean algunas creencias existentes sobre los bebés y los celulares: que les ocasionan cáncer, que los vuelve hiperactivos, que son transmisores de enfermedades (sí lo creo).
Pero son artículos como este: Uso de celulares y computadores expone a niños a miopía, los que me hacen dudar si estaré haciendo bien en permitir que #laprincesaGabby juegue con la tablet pues al apenas estar desarrollando sus ojitos. Aunque la Academia Americana de Pediatría dice que los niños menores de dos años no deben estar expuestos a ningún tipo de pantalla es algo un poco difícil de manejar en esta era tecnológica y como la duda crece, dejaré de escribir en este momento para ir corriendo a preguntarle al oftalmólogo, luego les cuento!